Periódico ilustrado
de la restauración
16 de abril 2004 - n°34 -
Talleres en todas partes
Once personas trabajan ahora sobre el Karrek Ven, tres de las cuales son
carpinteros navales.
El ritmo de trabajo se ha acelerado, y se pueden llevar varios talleres
al mismo tiempo.
Taller 1, seguimos emparejando.
Bajo las caricias a veces mordientes del cepillo eléctrico, el
vientre del Karrek Ven se va redondeando. Ahora es un placer para los
ojos.
Este trabajo no es nada fácil. En un principio, las fuertes diferencias
de nivel han sido reducidas. A veces, hubo que roer el espezor de una
varenga que resalía más de un 1 centímetro. Las varengas
demasiado hundidas fueron reemplazadas. Después, el lisado se fué
afinando, las diferencias extremas no siendo más que de uno o dos
milímetros. Una tercera mano está en curso para lisarlo
todavía más. Sin embargo no llegaremos a la perfección
ahora. Cuando empecemos a forrar, daremos el último toque.
Un equipo trabaja a babor y otro a estribor. El trabajo es duro, las máquinas
son pesadas y el aserrín de esta madera es corrosivo.
Pero los cuatro emparejadores ya no se quejan. Han tomado el ritmo y todo
el día van lisando y afinando.
Taller 2, hacia la proa.
La pieza para la roda está al venir. Seguimos esperándola.
Mientras tanto, un equipo libera la parte delantera y ha colocado la primera
cuaderna del barco.
No tenemos la madera para las otras, las entregas del aserradero han sido
perturbadas por la Semana Santa.
Taller 3: hacia la popa
Al otro lado, Luis Miguel en su nave espacial, coloca la última
cuaderna.
Al igual que en la parte delantera, es una puesta provisional, con una
falsa varenga hecha con un madero corto ya que en ambos casos, la pieza
en la que se apoya la cuaderna tiene que ser cambiada.
Ya tenemos la pieza para la parte delantera (la contra-roda que fabricaremos
al mismo tiempo que la roda), pero no la de la parte trasera (parte superior
del cucharro de popa), que es difícil de conseguir a causa de su
fuerte curvatura.
Taller 4, durmientes
Jonas intentando escapar del vientre de la ballena?
Un equipo retira los antiguos durmientes de cubierta, estas piezas gruesas
que aseguran la unión de las cuadernas entre ellas, bajo la cubierta.
Para esto, a veces hacen falta refuerzos por el tamaño de las piezas
que hay que manipular.
Julio Cesar, el nuevo carpintero naval, es el encargado de las operaciones.
Se trata de carpintería a lo grande, para variar de las lanchas
pesqueras que construía antes.
Como siempre en los momentos difíciles, Juán está
dispuesto a echar una mano... o más.
El durmiernte de cubierta ha sido entallado para alojar las extremidades
de los baos que se apoyan encima.
Taller 5 retirar el lastre
Tres pilas de madera fueron preparadas para recibir el primer tramo del lastre. Los otros calces del barco habían sido apartados de este tramo para que pueda bajar libremente. Pero no quizo moverse. En una de sus extremidades estaba unido con tres pernos en vez de uno solo como pensábamos. Dos de ellos estaban escondidos bajo dos varengas en buen estado que no habíamos cambiado! Hubo que destruirlas para acceder a los pernos. El lastre de fundición debe ser retirado para controlar el estado de la madera en la unión con la quilla. Luego lo volveremos a colocar con pernos nuevos...que aún no hemos conseguido. Diámetro de 7/8 de pulgada, muy escasos en el mercado.
La situación
La falta de madera retarda la talla de las últimas cuadernas,
pero no ralentiza demasiado las obras: tenemos la madera para los palmejales
y el emparejamiento puede proseguir, así como el trabajo sobre
la quilla.
Once personas, de las cuales solo dos están acostumbradas a este
tipo de obras, no son fáciles coordinar y conducir de manera eficaz.
El grupo sigue en rodaje, y seguimos esperando que venga alguien del extranjero...Un
error llega rápido, y es largo y costoso repararlo. Sin embargo,
la reconstrucción está ganando en repidez. Hay puestos de
trabajo libres: otro equipo podría trabajar sobre la cubierta.
Balance positivo: las donaciones suben más rápido que los
gastos. ¡El Karrek Ven logrará su restauración!
Proseguimos pués nuestros esfuerzos, aquí en el astillero
y gracias a vuestro apoyo! La nueva madera aún no ha sido comprada,
pero la estancia en el astillero ya está pagada hasta finales de
mes. La paga del equipo de trabajadores nunca ha tenido un día
de retraso. Su salario ha sido aumentado, para contrarrestar la inflación
del país y para alentar las competencias que están emergiendo.
