Como un arbol...
La restauración del Karrek Ven es como un árbol.
Entre más vamos subiendo, más el ramaje se vuelve complicado.
Parece que la cima está al alcance, pero antes de alacanzarla,
cuanto camino por recorrer! Su hubiesemos intuido tanta complejidad, astucia
y duplicidad, tal vez nos lo hubiesemos pensado dos veces antes de entrar
en el astillero...
Y sin embargo, siempre es igual con los barcos: desde la orilla, parece
fácil atravesar el oceano. Solo es agua y algunas ondulaciones.
Pero a medida que se avanza, las olas se van haciendo mayores, y cuando
uno se encuentra en plena tempestad, uno se pregunta que está haciendo
allí, sin tener más alternativa que la de seguir avanzando.
Es lo que estamos haciendo.
Con la descarga de la quinta carga de madera y las fiestas de carnaval,
las obras se han ralentizado un poco.
Aprovechemos para tomar un poco de distancia y echarle un ojo a esta embarcación.

La estructura del casco está muy avanzada.
Podría parecer que está casi acabada : solo falta cambiar
algunas cuadernas, la roda y la parte alta del cucharro de popa.
Podríamos acabar en un mes (este trabajo empezó hace cinco
meses; ver la primera cuaderna en el diario
n°5 del 26 de septiembre del 2003).
Pero no nos olvidemos del emparejamiento de las cuadernas, en la parte
externa para luego poder forrar (foto aqui arriba), y en la parte interna
para ajustar los palmejales y los durmientes. (emparejar significa nivelar
las cuadernas; forrar es poner las tablas-el forro-sobre el casco).

El emparejamiento es un trabajo enorme porque las cuadernas han sido
talladas sin bastante precisión.
El equipo de "roedores" Wilmer y Carlos, van dando grandes mordizcos
desde hace dos semanas y todavía no han acabado con la parte trasera!
El equipo Juan/ Luis Miguel retoca los palmejales por la parte interna
en donde hay que hacer este trabajo sobre las piezas longitudinales que
se pegan contra las cuadernas.

El trabajo sobre la quilla apenas está empezado: retirar la carlinga
las varengas para poder extraer el lastre.
Este corte de la quilla se publicó anteriormente en este diario
con algunos errores en la posición de las clavijas. Los pernos
de la quilla (5/9) y las clavijas de las varengas (2/7) y de la sobrequilla
(1/8) han sido retirados y hemos podido corregir esta figura. Solo hay
una clavija por varenga, excepto al pié del mástil.
3: cuaderna. 4: tabla del foro y sus clavos (10). 6: lastre de hierro.
Hay que proseguir y efectuar los cambios que se imponen (varengas y
cuadernas). Después, habrá que retirar el lastre para examinar
el estado de la quilla por debajo de esta pieza de fundición.

El equipo John/ Francisco ha empezado esta tarea, llevándola a
ritmo de aprendizaje. Son ebenistas poco acustumbrados a tomar plantillas
de este tamaño.
¿En donde están los carpinteros que construyeron la flota
de barcos de pesca de madera que nos rodea? ¡Quien sabe! Los pernos
del lastre salieron facilmente de sus agujeros ¡buena noticia! Tienen
una cabeza en forma de cono truncado. Todavía les quedaba mucha
vida por delante, pero el óxido los había empezado a mermar.
Cambiarlos no es un lujo.

Este perro bravo del Karrek Ven vigila las cuadernas nuevas. Para
poder deslizarlas bajo las cuadernas ya colocadas, hemos tallado un lado
en forma horizontal-así como la cuaderna que le corresponde.
Sobre esta estructura, el emparejamiento está muy bien hecho y
forrar esta parte será una tarea fácil. Dos equipos podrán
realizarla, uno a cada lado.
El ramaje se vuelve muy complicado en la cubierta
Pensábamos que bastaría con la refección de la mitad
más vieja de la cubierta y los baos que la sostienen.
Desgraciadamente, esto no era más que un sueño...
Todas las piezas que cambiamos en Turquía hace 17 años están
dañadas por el óxido de los clavos y los pernos galvanizados:
las cintas, la borda, el barraganete y el empalletado.
Karrek Ven podría volver al agua y dejar estas obras para más
tarde.
Pero ya que hemos empezado...Si queremos un barco capaz de resistirlo
todo, debemos estar dispuestos a todo.
Agárrense, que seguimos trepando.
Para cambiar estas piezas y colocar correctamente los durmientes de cubierta
por debajo, hay que destruir toda la cubierta, incluso la parte trasera
que volvimos a construir hace 9 años en Martinica!
Y con ello, la timonera, la mesana y las dos camaretas altas. Nuevas obras
importantes en perspectiva.
¿Y en donde vivir mientras tanto?
Solo nos queda la cofa arriba del mástil.
Hay que aumentar el equipo y empezar rápidamente.
Se necesita jefe de obras
Para realizar todo esto es necesario supervisar todos los puestos de
trabajo.
Aldo se fué (nuestro primer maestro carpintero chileno), y nadie
lo ha sustituido realmente desde entonces.
Se necesitan conocimientos prácticos y teóricos muy sólidos.
Nuestro amigo Didier acaba de pasar un mes asumiendo este papel magistralmente,
con lo que consiguió la confianza de todo el equipo.
En efecto, si con cierto conocimiento de los barcos, algo de sentido común,
lecturas y consejos de amigos, se puede guiar a los trabajadores e indicarles
algunos errores groseros, nada puede sustituir un trabajo constante con
ellos, pasando de un equipo al otro, tomando las herramientas para enseñarles
como se debe hacer o corregir los fallos. Es un puesto que pide una presencia
constante, y además de los conocimientos, bastante cortesía
y diplomacia...
Tradicionalmente, un viejo Maestro carpintero lleva ese papel, y a veces
el capitán cuando son los marineros que hacen el trabajo. (La escuela
de pesca tenía una sección de construcción naval).
Pero también hay un puesto de la misma importancia que normalemente
asume el armador: las obras no pueden avanzar si no estan alimentadas
(materiales, herramientas etcétera. Ya hemos evocado estos problemas)
Para el Karrek Ven, barco grande que necesita para su reconstrucción
materiales que hoy en día son difíciles de encotrar, este
es un puesto a tiempo completo.
Por ejemplo, ya no encontramos en donde galvanizar y forjar el hierro.
¿ Que debemos hacer? Hasta donde proseguir la búsqueda?
La simple masilla de aceite de linaza ya no parece existir, sustituida
por masilla epoxy que no es adecuada. Podríamos fabricar nuestra
propia masilla, pero tampoco sus componentes se logran encontrar.
Click click click, hay que utilizar Internet para entender como funcionan
estos productos y como sustituirlos.
Ciertas partes del barco precisaban piezas de madera naturalmente curvadas.
No las hallabamos en el aserradero. Acabamos encontrándolas pero
después de cuantas esperas y trámites!
Y ahora que la administración dió por fin su vistobueno,
la Luna no permite cortar el árbol...
Si queremos acabar esta restauración de buena forma en un plazo
razonable, un refuerzo en hombres es urgente, obreros y responsables.
(Sin mencionar todo el equipo que se puede echar a perder si nos faltan
brazos para encargarse de él).
En veces de situación, algunas noticias en breve.

La madera para la sobrequilla, las varengas y las cuadernas que faltan
ha llegado, pero no la que servirá para la roda y el cucharro de
popa.
Los arboles han sido localizados, los permisos de tala tardaron más
de un mes, pero ya los tenemos. Pero ahora, como la luna está creciente,
el guarda forestal no quiere talarlos.
No fué fácil pasar de 4 a 8 artesanos, pero lo hemos conseguido.
Ya no hay tensiones entre las personas.
Uno de los aprendices que estaba desde el principio se fué, pero
lo hemos sustituido hoy mismo. Los efectivos siguen en 9 personas.
La gente de Arawak, un barco bretón antiguo del tamaño del
Karrek Ven, nos han venido a visitar. Restauraron su barco antes que nosotros
y su ejemplo nos alentó a empezar las obras.

No hubieron donaciones esta semana.
Decepción.
Por primera vez hemos tenido que pedir dinero prestado para pagar los
gastos.
Hay más de 5000 euros y 1000 dólares de promesas en el aire...
pero no acaban de aterrizar.
¿Como colaborar? Haga clic aquí.
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