Periódico ilustrado
de la restauración
26 de marzo 2004 - n°31 -
El principio del fin
Oh, todavía no estamos cerca del final!
Nos harían falta más carpinteros para ello...
Seguimos avanzando muy poquito a poco por la falta de mano de obra.
Seguimos sin encontrarla. A todos asusta el tamaño de las piezas que hay
que manipular. Muchos vienen a ver y desaparecen; otros lo intentan un
momento y se van. Esto no significa que el Karrek Ven sea un dinosaurio,
pero los otros barcos que se construyen aquí son mucho más ligeros.
Pero nos vamos acercando a la meta.
La estructura está casi acabada y vemos claramente cuales son las próximas
etapas.
Cesar acaba de empezar las cuatro cuadernas centrales que faltan.
Así, el emparejamiento podrá acabarse pronto para empezar a forrar.
El trabajo es ahora mucho más cuidado y más preciso.
Con listones relevamos las curvas y las plantillas son cuidadosamente
trazadas.
Desde el interior, hay que tirar un poco del los palmejales nuevos que
se apoyan demasiado sobre las cuadernas viejas, dando una idea equivocada
de la curvatura real.
Para esto, instalamos un aparejo.
Nos falta un equipo para colocar las piezas y permitirle a Cesar consagrarse
únicamente a las cuadernas.
En 4 días, solamente un tercio de cuaderna ha sido realizado, cuando normalmente
deberíamos haber acabado dos.
Noticias de la proa
Seguimos esperando la pieza prometida.
El emparejamiento de las cuadernas vecinas ha empezado para poder disponer
los listones que permitirán trazar las plantillas de las cuadernas que
faltan por hacer.
Un trabajo difícil con cepillo eléctrico y en una posición incómoda.
Las cuadernas de la parte delatera serán mantenidas por varengas provisionales
que serán retiradas después para poder colocar el pie de roda ( pieza
que une la roda con la quilla).
Cuando estas cuadernas hayan sido colocadas, podremos retirar la roda
antigua (si nos han traído la madera).
Desgraciadamente perdimos a Wilmer, nuestro mejor emparejador. Es verdad
que entre la ebanistería y la carpintería naval existe un buen trecho.
Su colega John, lo ha reemplazado por algunos días, dejando el trabajo
sobre la quilla a sus ayudantes. Pero el también ha preferido volver a
piezas más pequeñas y ha abandonado las obras.
Estamos bloqueados por ahora.
La columna vertebral
Su consolidación está en buen camino: solo falta cambiar una varenga (2) sobre la quilla, la que está debajo del mástil.
Carlos y su colega Francisco se preparan a retirarla.
Serrucharon la clavija que la unía con la cuaderna (4) que han entallado
para levantarla con el gato y poder cortar la gruesa clavija central con
un soplete.
La clavija será cortada varias veces a medida que la vamos extrayendo
de la quilla para no tener que levantar demasiado la base del mástil (3).
Este ha sido levantado unos veinte centímetros y es mantenido por ángulos
de metal que le fueron soldados.
Cuando esta varenga haya sido colocada, la parte alta de las varengas
será emparejada con cepillo eléctrico y podremos instalar la nueva carlinga.
La quilla será lo bastante rígida para quitar el lastre de fundición y
examinar el estado de la madera por debajo de este lastre.
El trabajo sobre los palmejales está muy avanzado.
El Karrek Ven no tenía palmejales cerca de las varengas, aunque eso es
lo habitual. Los hemos agregado a cada lado. Esto refuerza la cohesión
entre las cuadernas en una parte un poco débil que es la unión entre cuadernas
y varengas, ya que estas últimas acaban a la misma altura.
El equipo Juan/Luis realizó este trabajo.
Aquí también hay que emparejar las cuadernas, esta vez en la parte interior.
Los palmejales deben adherirse perfectamente a cada una de ellas para
que la unión sea fuerte.
Después del cepillado, verificamos que el listón no tenga ondulaciones.
Por fin, cuando todas las cuadernas están listas, ponemos los palmejales y los clavamos con clavos gruesos de bronce con silicona de más de 15cm (6 pulgadas). Los palmejales tienen 7 cm de espezor y las cuadernas en ese lugar tienen 13cm. Los dos elementos son de madera de Puy. El barco es así casi indestructible! Estas uniones estaban en buen estado de todas formas. La parte dañada es la que ha sido expuesta al agua a lo largo del casco. Esto es una parte escondida de los barcos que hay que examinar de cerca. Los últimos palmejales están siendo colocados. Con la nueva carlinga, tendremos más rigidez y ya solo faltarán los durmientes (arriba de las cuadernas, debajo de la cubierta).
La situación
La estructura en general está casi acabada.
Solo falta el plato fuerte de la roda, el examen de la quilla y la refección
de la parte superior del cucharro de popa.
Este trabajo nos tomará un mes si encontramos otro carpintero.
Con un tercer carpintero, podremos empezar pronto el trabajo sobre la
cubierta, al menos que empecemos antes a forrar el casco.
Encontraremos por fin estos refuerzos?
No tenemos el presupuesto para traer de Europa o de Estados Unidos a un
carpintero y pagarlo en función de los sueldos de su país.
Los “compañeros del Tour de Francia” tenían previsto pagarse el viaje
(lo que podemos hacer si el carpintero se queda un tiempo suficiente),
y no pedían, como es su costubre, más que el sueldo local.
Desgraciadamente, la carpintería naval no es su especialidad y los compañeros
carpinteros no son muchos y ya están trabajando en otras obras.
No hay que desesperarse. Ya encontraremos a alguien, pero cuando?
El hermano de Cesar está acabando una barca y debería unirse a nosotros.
Ya veremos.
Buenas noticias en cuanto al equipo de jóvenes adultos. Dos antiguos tripulantes
del Karrek Ven deberían llegar dentro de un mes, uno de ellos está interesado
en aprender carpintería naval, mientras que el otro podrá trabajar en
reacondicionar y seleccionar el equipo y el material que hemos desembarcado
para las obras. Un profesor de buceo quiere venir a ayudarle, atraído
por el barco y su aventura.
Un refuerzo muy apreciable.
Poquísimos gastos esta semana: 548 €uros solamente.
Menos mal, porque, por tercera semana consecutiva, no han habido donaciones.
La deuda sigue creciendo.
Es duro!
Pero la situación no es desesperada, hay interesantes promesas de donaciones,
pero la distancia sigue creciendo entre las dos curvas: 2689 €uros!
Le va a costar a la verde volver a pasar por delante de la roja. Faltan
una nueva compra de madera, la estancia en el astillero, el aumento de
los efectivos y por lo tanto de los sueldos... hay que enderezar la situación
y solo los amigos del Karrek Ven pueden hacerlo, o encontrar a alguien
que pueda contribuir.
Para ayudar al Karrek ven a sobreponerse a esta situación, haga click
aquí.
Consulte también las noticias de primavera.
